24.10.14

Exposición permanente.

Nunca fui
del tipo de alumnas
que aprueban
todo a la primera.

Me sigue gustando
más
eso de probar primero
y arrepentirme
después.

Como aquel día
que hicimos pellas
en Historia Del Arte
porque decías que el nuestro,
nuestro arte,
iba a hacer historia.

Yo dije sí,
y mil veces sí,
por culpa de esa voz
con una cadencia a mitad camino
entre sociópata
y bebedor inconexo.

Quiero ser Gioconda
en el Louvre
de tu pecho,
y que extraños nos admiren
para pasar
a envidiarnos después.

Que Da Vinci
reviva en tus manos,
para pintar
cada centímetro
de mis ganas
al tiempo que llegamos
al sur
de mi sonrisa.

Porque cada una
de las estaciones
es una exposición permanente
del revés que me
supone
que aún sigas
aquí.

1 comentario:

  1. Desde mi humilde opinión te digo, que me parece uno de los mejores que has escrito (al menos de los que he leído).
    Sigue así y no te desanimes nunca ;)

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Mi caja de cerillas no es muy grande... Pero seguro que puedo hacer un huequito para la tuya :)